En el yacimiento de Torreparedones encontramos una antigua ciudad ibero-romana.
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Parque arqueológico
Torreparedones es un lugar que sorprende a quien llega por primera vez. Está situado en la campiña cordobesa, entre los ríos Guadalquivir y Guadajoz, y ocupa la cumbre de un cerro de 600 metros de altura, dominando así un ámplio territorio. El yacimiento arqueológico de Torreparedones, está localizado a 73 kilómetros de Córdoba, cercano a la localidad cordobesa de Baena. Actualmente es un parque arqueológico que tiene un centro de interpretación y está señalizado para los visitantes. Se trata de una antigua ciudad ibero-romana, en la que se han encontrado un templo de época ibérica, dedicado a la diosa Caelestis y un templo de época romana dedicado a la diosa Salutis.
Ciudad ibérica
El asentamiento fue habitado desde la Edad del Cobre hasta la Baja Edad Media. En la época ibérica y romana alcanzó el asentamiento su máximo esplendor, quedando restos de una potente muralla reforzada con torres para defensa de la ciudad y que ocupaba un espacio de unas 10 hectáreas. Los arqueólogos han encontrado un templo ibérico dedicado a la diosa Caelestis, que actualmente está reconstruido, en cuya excavación se hallaron cientos de exvotos. Este hallazgo, junto con la localización de un altar dedicado a la diosa romana Salutis y a la presencia de un manantial, indica que Torreparedones pudo ser un lugar de tipo salutífero al que peregrinaran los habitantes de la región buscando reparar su salud.
Ciudad romana
En época romana republicana fue colonizada por legionarios romanos que una vez licenciados recibían tierras para su explotación. La ciudad llegó a tener los típicos edificios civiles romanos, foro, basílica, templo y mercado. La ciudad, cuyo nombre no se conoce con certeza, aunque se apunta a Ituci Virtus Iulia, pudo participar en la guerra civil entre Cesar y los hijos de Pompeyo y fue abandonada en la Baja Edad Media, quedando en la actualidad los restos de un castillo construido en el siglo XIII.
